El sendero para subir a esta montaña sale del mismo parking
que la del Cuiña (ver entrada anterior), sólo en dirección opuesta. Durante
casi todo el trayecto se tiene una buena vista sobre el pueblo de Balouta y su
valle.
Esta ruta es un poco más difícil que la subida al Cuiña si
se elige el trazado que pasa siempre por la cresta, con algún tramo no apto
para niños muy pequeños. Fuimos con un niño de nueve años, sin problemas pero
con mucho cuidado en las zonas con fuerte pendiente. Si os queréis ahorrar los
puntos más peligrosos podéis optar por el camino que va en paralelo a la cresta
pero a una altura algo menor (ver mapa) y que al final llega al mismo sitio. De
hecho, hicimos la ida por el camino superior y la vuelta más abajo, más seguro.
Por lo demás, vale lo mismo que para el Cuiña y
prácticamente todas las montanas de los Ancares: puede hacer mucho sol y viento
(también frío) y conviene llevar la protección adecuada, además de unas buenas
botas de montaña de caña alta.
El único merendero con bancos y mesas que hay en el camino
es el que se encuentra al lado del parking del mirador, al principio de la
ruta.
En el cercano pueblo de Balouta hay una casa rural (Centro
de Turismo Rural Miravalles, ver entrada aparte) con restaurante por si queréis
pasar una noche o comer.
Mapa con detalles GPS: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=3415552
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